1) Sin haberlo planificado, recorro las calles de mi infancia en la urbanización La Florida en Caracas: el Callejón y la Calle Pedroza, la Av. Las Acacias en su tramo norte, que sigue siendo una de las más bellas de Caracas, siempre a la sombra de sus frondosas acacias, la Calle Los Samanes, la Av. Los Jabillos, que también preserva su grandes jabillos.
Despiertan gratos recuerdos, las patinatas navideñas, la primera novia, los partidos de fútbol callejero, las carreras a pie, de carritos construidos por nosotros, o en bicicleta, la vieja quincalla que tenía de todo y que ya no existe, la barbería que sigue allí, la gente que ya no está, las empanadas de la esquina, la pastelería de la otra esquina, más abajo, los juguitos, el colegio a una cuadra, las caminatas.
2) Varias invitaciones navideñas, los regalitos van y vienen; expresiones de afecto y amistad.
3) Ensalada de frutas tropicales, lo más refrescante y sabroso, piña, lechosa, melón, cambur, patilla, mandarina, jugo de naranja y un poco de limón. Una opción de cena ligera, para atenuar los excesos decembrinos; una pausa antes de volver a las ricas hallacas y al sabroso pan de jamón casi cotidianos por estos días.
